
Sueño con un día tenerte,
pero el sueño se me escapa,
pero el sueño se me escapa,
sueño que ya ni en los sueños,
tu amor reposa en mi cama.
No quiero seguir soñando,
pues cuando despunta el alba
siento mi amor estafado
y vuelve a llorar mi alma.
Pero vuelve a anochecer,
y sola sobre mi almohada
deseo soñarte de nuevo,
acariciar tu mirada.
Sueños que sueños son,
que el subconsciente regala,
sueños que sin quererlo
va alimentando esta farsa.
Soñándote no comprendo
por qué me siento una extraña,
tal vez porque aún soñando
tu amor se extingue en la nada.