
No siempre Don Diablo está haciendo diabluras
su tristeza a veces le despoja de maldad
se enreda con su rabo y esconde su bravura,
el fuego de sus ojos se apagan al llorar.
su tristeza a veces le despoja de maldad
se enreda con su rabo y esconde su bravura,
el fuego de sus ojos se apagan al llorar.
Encierra entre sus sueños plagados de ternura
recuerdos en la noche que le hacen suspirar
me mata ese dolor que lleva en la penumbra
que enerva más mi mente y me hace delirar.
Un ángel disfrazado bajó hasta el mismo infierno
llegando hasta su alma su voz se hizo escuchar:
no existe ser mas noble, con corazón mas tierno
arriba en las alturas, mi patria celestial.
La soledad es su aliada, le llena de apatía
el amor es culpable de tan hondo penar
su fuego fue apagando quedando en la agonía
prefiero su malicia a verle claudicar.